jueves, 6 de septiembre de 2012

HEMORRAGIA


La hemorragia es el flujo de sangre extravasada. La pérdida de sangre en el sistema circulatorio por lesión de los vasos sanguíneos o a causa de un trastorno hemorrágico. Puede ser externa (visible) o interna (oculta). Si la pérdida de sangre es superior al 10 % del volumen total que tenemos en nuestro organismo, se pueden producir síntomas como palidez, sudoración o desfallecimiento (shock).
La causa más frecuente de las hemorragias son los traumatismos producidos por accidentes. La velocidad con que sale la sangre depende del tamaño de la herida y del vaso dañado, desde rezumar de un capilar, fluir de una vena o salir barbaridades de una arteria. Si la lesión es interna (que no atraviesa la piel y no se comunica con el exterior) la sangre se va concentrando alrededor de los vasos dañados y se va acumulando debajo de la piel formando lo que llamamos cardenal o hematoma (zona enrojecida o morada, hinchada y dolorosa al tacto).
Hay que tener especial precaución en las lesiones producidas en los vasos internos que a veces se deben a inflamaciones, úlceras, infecciones o tumores. Hay que acudir al médico si observamos cualquier perdida de sangre de origen incierto. Las hemorragias internas del tracto digestivo se pueden observar en las heces, ya que pueden tener un color muy oscuro y también puede aparecer sangre en los vómitos. Las hemorragias internas son difíciles de detectar, y cualquier pérdida de tiempo en detenerlas pueden ocasionar gravísimas anemias.
Existen plantas medicinales con excelentes propiedades para aliviar las hemorragias. A continuación les aconsejamos algunas de ellas.
Fotografías de José Romero.

La "cola de caballo" (Equisetum arvense). Esta planta tiene propiedades hemostáticas (que cortan las hemorragias) y regeneradoras de los tejidos que forman los vasos sanguíneos. Nos puede beneficiar tanto interna como externamente. Se hará una infusión con 40 gr de tallos estériles por litro de agua, que dejaremos hervir 10 minutos y reposar otros 15 minutos. Se pueden tomar 3 tazas diarias o a cucharadas con más frecuencia. Con la misma infusión se harán lavados y aplicaremos compresas sobre las zonas afectadas.
La "ruda" (Ruta graveolens). Esta planta tiene la propiedad de fortalecer los capilares sanguíneos y un importante efecto antihemorrágico. Se efectuará una infusión muy suave, un trocito de tallo florido por litro de agua, que dejaremos hervir 5 minutos y reposar otros 15. Nos tomaremos no más de 2 tazas al día. Esta infusión también la podremos utilizar en compresas sobre las zonas afectadas. No hay que sobrepasar la dosis, pues esta planta es bastante tóxica.
La "centinodia" (Polygonum aviculare). Entre sus propiedades destacan las de aumentar la resistencia de los vasos sanguíneos y la de favorecer la coagulación de la sangre. Haremos una decocción con 40 gr de la planta (si está florida es más efectiva) por litro de agua, que dejaremos hervir 10 minutos y reposar un ratito.  Podemos tomar 4 tazas diarias. Esta planta se puede usar con toda confianza, pues carece de toxicidad alguna.
La "bolsa de pastor" (Capsella bursa-pastoris). Esta planta tiene propiedades para contraer las pequeñas arterias sangrantes. Efectuaremos una infusión a razón de 40 gr de la planta desmenuzada por litro de agua, que dejaremos reposar 15 minutos, y nos tomaremos 4 tazas al día, fuera de las comidas. La misma infusión sirve para aplicar compresas en las partes externas sangrantes, y para las hemorragias nasales (además de tomar internamente) se aplicarán bolitas de algodón, empapadas con la infusión, en las fosas nasales.

1 comentario:

  1. De la cola de caballo solo recordaba el efecto diurético. Muy interesante como siempre.

    Saludos

    ResponderEliminar